Hola a tod@s.
En una de las últimas sesiones que pude disfrutar estos días con el azor, y en una ocasión en la que se posó demasiado cerca de mi escondite, decidí montar toda la "artillería" y colocar un teleconvertidor, concretamente un TC-17, para intentar hacer algún retrato de este macho.
En un momento dado, una de las muchas avispas que a esas horas se adueñaban del bebedero y de su agua, comenzó a increparle revoloteando alrededor de su cabeza, y no es que este ave se inmute con las avispas, más bien todo lo contrario, normalmente no hace ni caso de ellas, pero en ésta ocasión no dejó ni un momento de tenerla bien controlada y vigilada con su mirada, sin dejar ni un momento de seguirla con sus ojos, no se si fruto de la osadía de la avispa, que parecía dispuesta a atacar decididamente cual David contra Goliat, o simplemente por la curiosidad que sentía hacia ella.
Ésta es una de las imágenes de aquella situación, espero que sea de vuestro agrado o cuando menos, os resulte divertida y simpática.
Un saludo.
D-300. 500mm f/4. TC-17. 1/800 a f/6.7, + 0.3 ev. ISO 640. Hide |
Buenísima Juanma :-)
ResponderEliminarGracias Juan! Un abrazote
ResponderEliminarPreciosa escena! ¿Quién venció? Un abrazo!
ResponderEliminarYo creo que acabaron los dos mareados ;-), o los tres, si contamos al fotógrafo je,je. Un abrazo Nacho
ResponderEliminarHola Juanma, vaya momento ha captado, vaya ojos los del azor. Desde luego la avispa debía de estar preocupada por sí acaso. Muy buena imagen.
ResponderEliminarUn saludo desde Girona
Gracias Mario! si, supongo que la avispa guardaría las distancias :-). Saludos
ResponderEliminarEres un artista en este tipo de fotos...Muy buena...
ResponderEliminarBuena semana
Noemí
Gracias por la información. Saludos
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